El pasado 2 de octubre terminaba el juicio contra los tres compañeros,
acusados de propinar una fuerte paliza a un madero que iba a caballo
durante unos disturbios el 11 de septiembre de 2011, por el aniversario
del golpe de Estado militar de Pinochet.
El 5 de octubre, el tribunal leí las respectivas sentencias, que quedaron de la siguiente manera:
Gonzalo Zapata: 541 días de
presidio menor en grado medio como co-autor del delito de maltrato de obra a
carabineros causando lesiones menos graves.
Victor Conejero: 541 días de
presidio menor en grado medio como co-autor del delito de maltrato de obra a
carabineros causando lesiones menos graves
Cristóbal Franke "Mono": 2 años de
presidio menor en grado medio, como co-autor del delito de maltrato de obra a
carabineros causando lesiones menos graves.
Afortunadamente, el tribunal no reconoció los agravantes que pedía la
fiscalía (alevosía y haber actuado dentro de un recinto religioso). Así
mismo, tampoco reconoció como atenuante lo que la defensa llamó
colaboración de los compañeros ante el tribunal. Esto es lógico pues los
compañeros, de hecho, no llegaron a reconocer nunca a los tribunales
del poder y por lo tanto se negaron a proporcionar nombres o datos que
pudiesen luego reutilizar para montajes o que pudiesen ser concluyentes
para nuevas represalias. Lo que sí reconoció fue la "irreprochable
conducta anterior" de los compañeros y por ello les concedió el
beneficio de la libertad condicional, descontando además de sus
respectivas penas el tiempo que los compas Cristóbal y Gonzalo ya
pasaron en prisión preventiva.
Los compañeros tendrán que estar sin embargo sometidos a control
policial constante, firmas en comisaría periódicas y demás medidas
restrictivas. Aun así eso es mucho mejor que cualquier cárcel.
“Lo hemos dicho antes, no
reconocemos sus tribunales ni sus jueces que nos vengan a sermonear. Estamos
orgullosos de lo que somos y nunca nos verán besar la bota del
arrepentimiento. Podrán dictar condenas para intentar domesticar nuestra
voluntad, mas solo perderán el tiempo. Al igual que los ríos en temporadas de
lluvias, por mas que intenten controlarlos, el cause desborda todo limite y
sigue su curso porque es salvaje" Palabras de los compañeros.
Valladolor no admite comentarios
La apariencia como forma de lucha es un cancer
El debate esta en la calle, la lucha cara a cara
Usandolo mal internet nos mata y encarcela.
Piensa, actua y rebelate
en las aceras esta el campo
de batalla.
si no nos vemos
valladolorenlacalle@gmail.com