¡Basta de procesiones!


No hemos venido aquí a sumarnos como comparsas a este desfile organizado por los sindicatos, auténticos garantes de la paz social y del mantenimiento de este mundo inhabitable. Tampoco vamos a desplegar ningún tipo de apoyo crítico. Venimos a expresar nuestro más profundo rechazo a este tipo de actos, que entierran y canalizan cualquier atisbo de lucha de clases, desplazando la confrontación para dar paso a insoportables caminatas y procesiones, bien complementadas con la dosis necesarias de tranquimazines.

La mentira del Estado del Bienestar en los países occidentales hace ya unos cuantos años que se ha hundido. Después de haber hipnotizado al personal con un fugaz periodo "próspero" en el que se permitió a las proletarias el consumo alienante de algunas mercancías que hasta entonces desconocía, la única y verdadera naturaleza del capitalismo vuelve a manifestarse en toda su crudeza en todo el mundo. Muerte, miseria, explotación, destrucción, alienación... La contraposición del capitalismo respecto a la vida es cada vez más brutal. Las medidas que hoy se imponen a escala planetaria para mantener este sistema de muerte no dejan lugar a dudas: la mayoría de la humanidad tiene que sacrificarse hasta reventar para salvaguardar los bolsillos de los burgueses.

Ante esta realidad, el proletariado se encuentra luchando de diferentes formas en distintos rincones del mundo por defender su pellejo ante los planes terroristas del Capital. Desde el Norte de África o desde Grecia retumba la ira proletaria, que ya no acepta más entregar su vida por la economía. Las luchas por cuestiones inmediatas, sean contra el incremento de las medidas de austeridad, contra el aumento de extensión e intensidad de la jornada laboral, o contra cualquier otro aspecto que castiga nuestras vidas, van revelándose como expresiones de una lucha global que va a las raíces de nuestros problemas. Se hace evidente que sólo sobre los escombros de esta sociedad podemos abolir nuestras míseras condiciones de vida.

Por todo ello, rechazamos y luchamos contra todas las mediaciones y organizaciones que parcializan y sectorizan nuestras luchas, que quieren transformarlas en reformas al interior del Estado, que buscan eliminar la acción directa y sustituirla por ruegos y peticiones, que quieren que veamos imposible el proyecto de destrucción de los explotadores para aceptar la negociación con ellos. Partidos, sindicatos, ONGs, y demás organizaciones que siguen sus lineamientos políticos, pese a que adornen su discurso con una fraseología radical, reman precisamente en este sentido: en el de evitar la ruptura revolucionaria.

Es hora de que las luchas que en otras regiones se desarrollan se abran paso también en Asturies. Nuestras condiciones de vida así lo exigen. Nuestro enemigo, el Capital, es el mismo en todas las partes del mundo. Nosotras, también.

¿Ya hemos pedido la renuncia o atacado a algún gobierno?
¡Asumamos nuestra lucha contra todo gobierno y el Estado!

¿Ya hemos expropiado o atacado las mercancías?
¡Asumamos que su existencia es la razón de nuestras miserias!

¿Ya hemos desenmascarado a algún sindicato?
¡Asumamos una lucha fuera y en contra de los sindicatos!

CONTRA LA DICTADURA DEL CAPITAL Y LA AGUDIZACIÓN DE LA MISERIA...

¡ORGANICÉMONOS FUERA Y EN CONTRA DE LAS ESTRUCTURAS DEL ESTADO PARA LUCHAR!


amigosdeoctubre@gmail.com

Valladolor no admite comentarios
La apariencia como forma de lucha es un cancer
El debate esta en la calle, la lucha cara a cara
Usandolo mal internet nos mata y encarcela.
Piensa, actua y rebelate
en las aceras esta el campo
de batalla.

si no nos vemos
valladolorenlacalle@gmail.com















ARCHIVO

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Contrainformacion internacional

Anticarcelario / contra la sociedad cárcel

"Las prisiones son una parte más de la esencia represiva de todo Estado, no hay que olvidar la parte que nos toca a lxs que aún seguimos en la calle.

No podemos ver las cárceles como algo ajeno a nuestras vidas, cuando desde temprana edad hemos sido condicionadxs a no romper las normas, a seguir una normalidad impuesta; el castigo siempre está presente para lxs que no quieren pasar por el aro.

En el trabajo, en la escuela... domesticando y creando piezas para la gran máquina, piezas que no se atrevan a cuestionar o que no tengan tiempo para hacerlo.

Hemos sido obligadxs a crecer en un medio hostil donde es dificíl desarrollar nuestros propios deseos.

La rebeldía brota de algunxs, otrxs simplemente se acomodan en la mierda, tapando sus frustraciones con lo que le dan quienes antes les despojaron de todo. O viendo sus problemas como algo aislado, único y personal.

Para lxs que no tragan o no se adaptan al gran engaño ahí tienen sus cárceles, reformatorios, psiquiatrícos ... creados por los que no quieren ver peligrar las bases de su falsa paz.

No podemos ignorar la lucha de lxs compañerxs presxs.

Su lucha es nuestra lucha."