Reproducimos pues el panfleto que nos ha llegado mandando toda nuestra solidaridad a lxs compañerxs palentinxs.
Detenida por vender material anarquista y agredir a un policía
...LO QUE SUCEDIÓ
Nos dirigimos a vosotros para informaros de lo que a nuestro jucio fue un abuso desproporcionado de la policía municipal hacia el grupo de personas que con libros, revistas, películas, trataban de celebrar en la plaza La Puebla el primer encuentro de distribuidoras anticomerciales el sábado día 26 de febrero.
Todo quedó en un intento. Aún estábamos sacando el material cuando hizo acto de presencia la policía nacional. Su despliegue ya causó sensación en el barrio. Vecinos que se asomaban a los balcones, gente que salía del bar, chavales que estaban en la plaza y no perdían detalle... Ante la llamada de los nacionales acudió una dotación de los locales que volvieron a pedir documentaciones instándonos a abandonar la plaza.
De ello hablábamos entre nosotros mientras recogíamos, cuando de otro coche bajaron dos agentes más de la municipal, uno de ellos con porra en mano apestando a alcohol y con muy malas maneras, nos comunicó que: “por mis cojones os requiso esto”.
Lo siguiente fue una secuencia de gente corriendo con cajas, tableros, caballetes y ellos detrás intentando arrebatarnos el material. Una chica que llevaba una caja con libros y que entró en la panadería de la esquina fue sacada a golpes y arrojada al suelo.
El resto intentaba interponerse y detener la agresión. A otra también la tiran al suelo y arrastras la llevan detenida. En comisaría el de la porra suelta la lindeza: “porque eres mujer te has librado de que te abra la cabeza” cometario que hace en presencia de su compañero y otros agentes de la nacional.
Tras dos horas y prestar declaración queda en libertad. La propia policía nacional reconoce lo desmedido de lo ocurrido pero lo cierto es que la acusación es grave: atentado contra la autoridad.
Como bastante gente vio toda la actuación policial y como habrá juicio necesitamos
vuestra colaboración, necesitamos testigos que acrediten que sucedió lo que sucedió.
Basta con decir la verdad. De alguna manera tendremos que detener a quienes abusando de su uniforme y con la ley por montera ejercen tal brutalidad sin motivo alguno.
Juzgad vosotros mismos...