LA HUELGA GENERAL ES NECESARIA
pero ¿cómo? ¿por qué? ¿CONTRA QUIÉNES?
La dirección y la labor realizada por los sindicatos mayoritarios, CCOO, UGT, en los últimos meses es una mierda pinchada en un palo. ¿Pero son sólo estos últimos meses, de crisis y gobierno del PSOE, los que han visto crecer esta política sindical totalmente vendida y paralizante de las energías y las luchas de los trabajadores? Justamente no. La dinámica seguida por los sindicatos mayoritarios desde la última gran huelga general contra Felipe González (el 14D), al menos, pero más allá, desde los últimos años del franquismo (el Pacto de la Moncloa) ha estado caracterizada por el interclasismo, la subordinación de los sindicatos a los intereses de la empresa, la economía nacional o el grupo de poder de turno que gobierne (aquí, en EEUUropa), y por una continuada y espesa siembra de virus pralizantes, democratistas, negociadores, que han llevado a la clase trabajadora más consciente y combativa al rechazo total de estos organismos vendidos al capital. Pero junto a este rechazo, necesario y legítimo, se está extendiendo una burda y simplista crítica "a los sindicatos" (desde CCOO a UGT, pasando por CGT, CNT, sindicatos de base o plataformas sindicales; pero olvidando, como que no quiere la cosa, a toda la calaña "coorporativista" -sindicatos de cuadros, CSIF, Asociaciones profesionales, etc). Esta crítica, que se ve en boca de los medios afines al PP, pero también al PSOE (como el famoso anuncio de la SER de "legalitas para todos los conflictos laborales), lejos de ser una crítica de clase, que procura crear y extender organizaciones de los trabajadores para su propia defensa, es una crítica derechista y reaccionaria que busca minar "por los siglos de los siglos" los intentos del proletariado peninsular para reorganizarse y dotarse de los organismos y los medios de lucha necesarios para defender y conquistar mejores condiciones de trabajo y de vida.
Es decir, de una obviedad (que la dirección y la línea de los sindicatos mayoritarios es interclasista, procapitalista y saboteadora de las luchas) se pasa a la negación del sindicato "per se", negación que se aplica a cualquier forma sindical y, más aún, a cualquiera lucha obrera. Los mismos que hacen esta crítica son los que se llenan de mierda la boca con perlas como "las huelgas no cambian nada", "la huelga favorece al gobierno/a la oposición", y todas estas sandeces que anto se oyen y que nada tienen que ver con nuestros intereses reales en tanto que trabajadores (activos y en paro).
Y, aún así, a pesar de la mierda que arrastran los sindicatos convocantes del más que posible fracaso anunciado, de la huelga general del 29 de setiembre, es nuestro deber como proletarios hacer huelga, extender nuestros motivos y nuestras reivindicaciones, y plantear unas bases teóricas, prácticas y organizativas para continuar la lucha hasta sus últimas consecuencias.
Tras la parálisis sindical y las componendas, los sindicatos se ven forzados (por la propia inquietud de los trabajadores en los curros y en las colas del paro) a convocar una huelga general aún y contra su propia voluntad, pues como el Toxo dijo "una huelga general es muy difícil de controlar". Y el papel de estos voceras es ese, el control de las luchas obreras para que no se salgan del marco democrático de esta sociedad burguesa.
Por esto y mucho más, la huelga general es necesaria para los trabajadores, y no para el sindicato C, U o H.
Es necesaria porque la reforma laboral del gobierno socialista es el ataque más sangrante contra el conjunto de los asalariados que ha habido en este país desde el infame Pacto de la Moncloa.
Es necesaria porque debemos defender las pocas conquistas que aún nos quedan y levantar barricadas de fuego contra las reformas que vienen y vendrán.
Es necesaria porque medida tras medida del gobierno, y de todos los gobiernos de uno u otro signo que comandan en esta putrefacta EEUUropa, los trabajadores somo siempre los paganos y los que perdemos una y otra vez.
Es necesaria porque el capital, nacional e internacional, industrial y financiero, debe saber que la clase obrera está aquí para destruir su mundo de explotación, derroche y miseria.
Es necesaria para anular y revocar esta reforma laboral, para que nos se continue esta política de reformas contra los trabajadores, para que los parados sigan cobrando íntegramente la ayuda y todo el tiempo que se encuentren en paro, para que no se lleve a cabo la funesta reforma de las pensiones ni ninguna otra medida, reforma o ley lesiva para las condiciones de vida de los proletarios (nativos e inmigrantes, activos y parados), que sobrevivimos en este trozo de tierra al que llamaron España.
¿Que los sindicatos no hacen nada y ahora quieren que vayamos de su mano para aparentar que hacen y permitir que se continuen las reformas? Cierto, pero muchos deberíamos mirar un poquito más cerca, en nuestro barrio, en nuestro curro... los proletarios que luchan día a día hoy son pocos, muy pocos... y no toda la culpa es de los sindicatos vendidos ni de otros. Los peores, en esto, somos nosotros mismos con nuestra comodidad, nuestras cadenas de oro (coche, hipoteca, ordenata...) y nuestra mentalidad burguesa falsificada.
¿Que la huelga la convocan unos sindicatos vendidos, tarde, mal y nunca?
Cierto, muy cierto, pero eso nada quita a la necesidad de que los trabajadores nos organicemos para luchar por nuestros propios intereses de clase, enfrentados radicalmente a todos las organizaciones y los partidos burgueses (la larga sopa de letras de uno y otro signo) y contra todas las organizaciones que reclamándose de los trabajadores actúan como los enviados de la burguesía en las filas obreras que minan y destruyen cualquier conato de lucha proletaria.
La huelga general debe extenderse a pesar de y contra esa línea sindical, subvencionada por el capital y supeditada a los burgueses que gobiernan a la sombra de los zapateros y rajoys de turno.
Es momento de unirse a todxs lxs trabajadores en la lucha, a todos los asqueados del sindicatos o que militan en sus bases voluntariamente y defienden en su seno que sólo la lucha puede mejorar las condiciones de la clase obrera.
Cuando un delegado de CCOO de una fábrica, rechaza los despidos asumiendo el acuerdo tomado en asamblea a mano alzada, y al mismo tiempo, las cúpulas del sindicato, a nivel regional y nacional, firman los despidos dejando a su puto delegado más tirado que un contenedor, no hace falta ser muy lumbreras para entender la diferencia entre "el sindicalista" que quiere luchar y el burócrata gestor de nuestra miseria. Todos los militantes honrados de estos y otros sindicatos subvencionados, legalitas, interclasistas, o de discurso "errático", que crean en la lucha de clase, deberían asumir que, aún siguiendo en su sindicato "por inercia" o "por creer que hay que estar donde los trabajadores están", su lucha debe llevarse también y sobretodo fuera de esos organismos, con la vista puesta en levantar y sostener verdaderas organizaciones de lucha económica, independientes y de clase.
El problema de los sindicatos mayoritarios, y de otros, es la línea, la dirección, su tarea cotidiana desde los primeros 70 hasta hoy: participación en los comités de empresa (el organo interclasista y negociador por excelencia), en las elecciones sindicales (la asamblea de trabajadores debe decidir sus representantes revocables sin papeletas, votos ni maniobrismo), el olvido de esa asamblea (que es el único organo legítimo en conjunto de todos los trabajadores en el curro), los liberados y delegados "muy bien elegidos", mayoritariamente trepas, vagos y parásitos, la negociación en sí, el legalismo, el pacificismo ciudadanista, el asumir los intereseses de la empresa... esto no es exclusivo de CCOO y UGT, esto es la mierda cotidianaque viven la mayor parte de los trabajadores en los tajos. Pero esto no nos lleva a olvidarnos de tantos hombres honrados que procuran o han hecho verdadera lucha económica de defensa de los trabajadores, sin nombre, sin honra, sin horas ni liberación alguna.
Si por nuestra parte apostamos por la creación de organismos independientes de los trabajadores que luchen por los trabajadores, por intereses de clase, con medios, métodos y fines de clase, superando el marco democrático de falsa confrontación (organismos como las cajas de resistencia, los grupos proletarios, las asambleas obreras que se unen en torno a reivindicaciones de clase...), antilegalistas (la ley es del capital y la burguesía que lo gobierna), antipacifistas (la paz social es la perpetuación de la derrota), en resumen, anticapitalistas y antiburguesas, no rechazamos nunca a los militantes obreros que dentro y fuera de estos y otros sindicatos reaizan intentos de unión de clase, con principios de clase, contra las cúpulas sindicales, y que, por encima de siglas y sectarismos ideológicos, buscan la unidad cada vez más creciente de todos los trabajadores.
Es necesario más que nunca extender las luchas obreras y la solidaridad con las luchas que se producen y producirán en el futuro,
Es necesario llevar la huelga general hasta el punto de no retorno para que los "controladores" se descontrolen, y el tiro de la pasividad les salga por la culata,
Es necesario construir y sostener, desde ya, organizaciones independientes de los trabajadores para nuestra propia defensa, y hay que estar codo con codo con todos los proletarios que estén dispuestos a luchar contra el capital sin ambages, y contra todos sus defensores, falsos críticos, sostenedores, gestores y lacayos.
¡ABAJO LA REFORMA LABORAL!
¡Toxo y Mendez al museo de los horrores!
Zapatero, Corbacho, Rajoy, Montoro y compañía: ¡al Paredón!
POR LA HUELGA GENERAL, TOTAL Y SALVAJE
Por la organización independiente del proletariado
ABAJO EL CAPITAL Y EL ESTADO BURGUÉS.
Valladolor no admite comentarios
La apariencia como forma de lucha es un cancer
El debate esta en la calle, la lucha cara a cara
Usandolo mal internet nos mata y encarcela.
Piensa, actua y rebelate
en las aceras esta el campo
de batalla.
si no nos vemos
valladolorenlacalle@gmail.com