- Consideramos que la llamada crisis económica no es más que una de las facetas del sistema capitalista, una etapa en la que se polariza aún más la sociedad entre quienes lo tienen todo y los que no tienen nada. Por lo que la crisis no es el problema, el problema es el sistema.
- Además, nos posicionamos en contra de los recortes en Educación y de la supresión de becas, que suponen una mayor vulnerabilidad de nuestra sociedad a presentes y futuras crisis, dado que potencian una mano de obra barata y poco cualificada y una educación elitista. En la misma línea van las medidas de reforma universitaria emprendidas por el gobierno central y acatadas por el resto de instituciones como el tasazo universitario, la eliminación de carreras o el despido masivo de trabajador@s de todos los niveles educativos. Rechazamos también la línea de política universitaria impuesta unilateralmente, que se materializa en la Estrategia Universidad 2015.
- En ese sentido, hacemos hincapié en nuestro rotundo rechazo a los recortes en investigación, que supone una pérdida absoluta de capital humano cualificado, en cuya formación ha invertido grandes sumas el conjunto de la sociedad, y que se plasma en la actual fuga de cerebros con 200000 jóvenes exiliad@s y en aumento.
- Entendemos que la respuesta que merece esta situación no es el silencio y la sumisión ante el despotismo de los distintos gobiernos. Por eso llamamos a la movilización sostenida -como hemos hecho hasta ahora- y a la organización de los sectores más afectados -como por ejemplo se hace en la asamblea de estudiantes de la Uva-. Esta huelga es sólo un paso más, pero que debemos de dar para aunar fuerzas como sector.
tomalauva.blogspot.com.es
El pasado 19 de mayo, en Valladolid, la comunidad educativa ha salido a la calle en defensa de la Escuela Pública
"El gobierno Rajoy ha aprobado un decreto ley con recortes en educación para ahorrar 3.000 millones de euros. Contiene un aumento del alumnado por clase del 20%; la subida de la jornada lectiva semanal mínima a 25 horas en primaria y 20 en secundaria;la no sustitución de las bajas inferiores a dos semanas, etc.
El ahorro se obtiene fundamentalmente con el despido (o no contratación) de decenas de miles de profesores interinos que los sindicatos estiman del orden de 100.000 personas en base a la experiencia de Madrid. El propio ministro Wert lo reconoce cuando asegura que no es para tanto, que si fueran 100.000 ahorrarían 4.000 millones en vez de 3.000. Tremenda destrucción de empleo en un país asfixiado por un paro que se acerca a los 6 millones. Además, aunque se niegue cínicamente, deteriorará gravemente la calidad de la educación pública, las condiciones de trabajo del profesorado y crecerá el malestar docente. No son tijeras, son hachazos y la poda se puede cargar el árbol. Porque si invertir en educación es invertir en futuro, desinvertir es hipotecarlo.
En este proceso de deterioro, Castilla y León no es una isla y a pesar de las declaraciones apaciguadoras del Consejero de Educación, la Junta no se va a desmarcar de la política educativa del Gobierno central.
Y no parece que acaben aquí las agresiones. Para el ministro una cosa son los recortes y otra la nueva reforma educativa que piensa acometer. Para ello necesita deteriorar primero la educación pública, con la excusa de la crisis, para después desregularla y acometer su privatización. Es lo que hizo Bush en Nueva Orleans: aprovechar el huracán Katrina para cargarse la educación pública y el potente sindicato de maestros, siguiendo los consejos neoliberales. De 123 escuelas públicas se pasó a 4 y se despidieron a 4.700 maestros sindicados.
En España, la estafa que está sufriendo la educación pública, que golpea su calidad y la compensación de desigualdades, busca transformar la Educación Pública en la escuela para pobres que era en el franquismo, subsidiaria, además, de una enseñanza privada, entonces como ahora, confesional y mercantil.
Por eso, la Plataforma por la Escuela Pública, Laica y Gratuita de Castilla y León llama al profesorado, pero también a toda la comunidad educativa y al conjunto de la ciudadanía, a que se sumen a la marea verde, participando, cada cual a su manera, en la huelga y en las manifestaciones convocadas en la región el día 22 de mayo".
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Huelga en el sector de la educación: los proletarios deben luchar en defensa de sus intereses de clase al margen de las divisiones que la burguesía y sus aliados entre las filas obreras imponen.
Trabajadores de la escuela:
El 22 de mayo todas las grandes centrales sindicales han convocado una huelga nacional en el sector de la educación en protesta por los recortes que el gobierno ha impuesto en los próximos Presupuestos Generales del Estado y que amenazan con reducir considerablemente los recursos con que contará el año que viene.
Las consecuencias directas de estos recortes repercuten inmediatamente en las condiciones de existencia de los trabajadores de la escuela: despidos, rebaja de salarios, merma en las condiciones de trabajo… No son una entelequia ni son un ahorro a favor del interés conjunto de la sociedad, son un ataque a la situación ya de por sí penosa que arrastran los proletarios. También los proletarios empleados en el sector público, como son los de la escuela, que hasta ahora podían parecer al margen del huracán que es la crisis capitalista, comienzan a sentir la fuerza de este.
Después de meses de ataques continuados a los proletarios a través de medidas antiobreras, reformas, recortes, ajustes… y en este caso en particular de descalificaciones a los proletarios empleados en el sector público, que son puestos por boca de los burgueses como los causantes de prácticamente todos los problemas que padece el país… los sindicatos amarillos han convocado una huelga general de educación. Si lo han hecho es para cumplir el papel que tienen en el sistema de explotación capitalista y en su representación democrática: contener la tensión social desviándola de los cauces clasistas y llevándola al dique seco de la conciliación entre clases, de la protesta estéril, de la huelga inutilizada de ante mano por el preaviso y los servicios mínimos.
Proletarios:
La lucha en defensa de los intereses inmediatos de la clase obrera es irremediable. La burguesía no piensa dar marcha atrás en estas políticas que buscan aumentar la explotación de los trabajadores, que van a rebajar sus condiciones de existencia a los mínimos necesarios para que el capital vuelva a remontar la senda de beneficios sin la que no puede existir. Cada vez se entiende como algo más cierto que luchar va a volverse inevitable para los trabajadores.
Pero esta lucha, para ser eficaz, debe romper la camisa de fuerza en la que las fuerzas de los sindicatos amarillos y de los partidos falsamente llamados obreros pretenden meterla. Es necesario superar los límites corporativos con que estas fuerzas de la conciliación entre clases quieren obligar a los proletarios a batirse los unos separados de los otros, sin unión ni solidaridad. Es necesario romper con los criterios pacifistas y legalistas que transforman la lucha en una parodia de la que la misma burguesía ya se ríe públicamente.
Para luchar y vencer los proletarios deben reanudar el camino del enfrentamiento de clase abierto y declarado, en defensa intransigente únicamente de sus intereses de clase… Juntos profesores funcionarios, interinos, personal administrativo y de servicios, bedeles… Contra la fuerza explotadora del patronato público. Agrupados en torno a los métodos y a los medios de la lucha obrera y por las reivindicaciones que fortalecen la unidad de clase:
-Subidas de los salarios. Sobre todo de aquellos más bajos. No a la congelación salarial.
-No a los despidos. Pago íntegro de los servicios, con las correspondientes vacaciones y extras en las sustituciones y parciales.
-Contra las medidas antiobreras del gobierno.
mayo de 2012
Partido Comunista Internacional El Programa Comunista
www.pcint.org