Unos 200 profesionales de la sanidad pública abuchean a Mas por los recortes
'Con la salud no se juega' han espetado al 'president'Unas 200 personas han protestado durante la visita del presidente de la Generalitat a Tarragona por los recortes previstos en el Hospital Joan XXIII de la localidad, donde se prevé una disminución del 16% del presupuesto y más de 250 despidos.
Mas se ha reunido en el ayuntamiento con el alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, quien le ha transmitido su preocupación por estos recortes, superiores en Tarragona a los que se aplican en otros hospitales del país, según ha explicado el propio alcalde.
Tras la reunión, y como secretario general de CiU, Artur Mas ha acudido a la presentación de la candidata de su partido a la alcaldía de Tarragona, Victòria Forns, en un acto que se celebraba en uno de los Tinglados del Muelle de Costa del puerto tarraconense.
Mas ha llegado al Tinglado con 25 minutos de retraso, a las 20.25 horas, y ha entrado por una puerta trasera, con lo que ha evitado los abucheos de los 200 concentrados frente a la entrada principal, que han gritado consignas, han hecho sonar sus silbatos.
Con el acompañamiento de un burro, los manifestantes han desplegado una pancarta en la que, en catalán, se leía "No a los recortes sociales y de los servicios públicos".
En otras pancartas que portaban se podía leer: "No al recorte de la sanidad" y "Con la salud no se juega, señor Mas".
Los manifestantes han estado separados de la entrada del Tinglado primero por un cordón instalado por los Mossos d'Esquadra y, luego, por barras de hierro sujetadas por los agentes, lo que ha provocado algunas escenas de tensión y los correspondientes empujones, aunque la situación no ha llegado a más.
Tras la entrada en el recinto de Mas, los trabajadores sanitarios han repartido también octavillas con el lema "Despidos = Aumento listas de espera".
EUROPA PRESS – GRANADA
Defiende la legalidad de su actuación en el conflicto que enfrentó al Ayuntamiento con la empresa y personal de recogida de basura
La alcaldesa de Ogíjares, Herminia Fornieles (PSOE), ha defendido la legalidad de su actuación en no aceptar la subrogación del material y el personal de la empresa que se encargaba de la recogida de la basura (Cespa) tras la huelga del pasado mes de octubre y ha anunciado recurso contra la sentencia del Juzgado de lo Social 1 de Granada que condena al Ayuntamiento a indemnizar a los trabajadores despedidos tras el conflicto o readmitirlos.
En declaraciones a Europa Press, la regidora ha asegurado que el Consistorio basó su actuación «en abundante jurisprudencia» al respecto, y ha criticado que el PP, que le ha acusado de «mala gestión», «defienda» en este caso los intereses de la empresa frente al de los ciudadanos de la localidad.
Según ha explicado, el Ayuntamiento defiende que no existe subrogación alguna y recuerda que no ha aceptado ni material ni personal y que de hecho hizo una selección de los trabajadores cuando asumió el servicio y sacó a concurso los medios materiales para comprarlos.
Sobre la prestación del servicio de recogida de basuras en la localidad ha reconocido que hace falta tiempo para que sea óptimo, pero ha negado que actualmente sea «pésimo», como ha asegurado en rueda de prensa la candidata del PP a la alcaldía de Ogíjares, Lola Mateo. «No es óptimo, pero tampoco pésimo. Todo es mejorable», ha señalado.
Para Herminia Fornieles, el Partido Popular demuestra que se sitúa «al lado de la empresa», a la que pretende «beneficiar», cuando, según ha recordado, llegó a cobrar al Ayuntamiento por material que ya estaba prácticamente amortizado. Por eso ha anunciado que el Consistorio presentará un recurso contra la sentencia, porque «entendemos que estamos defendiendo los intereses del municipio».
Cort mantiene su último ofrecimiento a los trabajadores y dice que no puede ceder más
El comité de empresa dio a conocer a los trabajadores la última oferta de Cort.Miquel Massutí
Palma. A las cinco de la mañana de unos doscientos conductores de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) se concentraron en las cocheras situadas en la carretera de Son Banya en el tercer día de paros parciales convocados por el comité de empresa. Permanecieron allí hasta las ocho de la mañana, cumpliendo así las tres horas estipuladas en el paro parcial, como sucedió en las otras dos convocatorias del jueves y viernes de la semana pasada.
Los empleados concentrados a primera hora de la mañana vieron salir a los autobuses, que cubrían los servicios mínimos, entre un amplio despliegue policial, con críticas a la dirección de la empresa municipal y al ayuntamiento de Palma por haberles obligado a cumplir 85 de los 168 servicios programados entre las cinco y las ocho de la mañana.
El decreto de servicios mínimos firmado por el teniente de alcalde de Movilidad y presidente de la EMT, José Hila, antes del inicio de los paros parciales, establecía la obligatoriedad del cumplimiento del 50 por ciento de los servicios fijados.
Antes de la salida de los primeros vehículos, el presidente del comité de empresa, Joan Porquer, explicó a los trabajadores que en la reunión mantenida el domingo se había decidido dejar salir los servicios mínimos para poder continuar con las negociaciones.
"De momento no se ha perdido nada", apuntó Porquer, tras repasar algunos de los logros del preacuerdo alcanzado el pasado viernes: la instalación de baños al final de los trayectos, mamparas en los autobuses y la no apertura de expedientes disciplinarios a los trabajadores que incumplieron los servicios mínimos en los paros parciales de la semana pasada.
Porquer anunció que se volverá a reunir el comité para decidir los pasos a seguir a partir de ahora e intentar llegar a un acuerdo con el fin de evitar la huelga convocada para los días 4 y 5 de mayo.
Sin embargo, estas explicaciones no convencieron a una parte de los empleados concentrados que lanzaron quejas contra los representantes sindicales, del comité de empresa y la dirección de la EMT: "¡Dejar salir a los servicios mínimos es una desconvocatoria del paro!"; "¡Sólo si no sale nadie se podrá conseguir algo!";
Otros pidieron a gritos el cambio de interlocutor en las negociaciones.
Uno de los empleados que secundaron las protestas dijo que la gerente de la EMT, Fuensanta Paris, "está desautorizada y no es de fiar".
Mientras seguían las acusaciones entre unos y otros, iban saliendo de las instalaciones municipales los autobuses y llegaba la línea 81, que transportaba a los conductores que debían trabajar.
Los buses salieron con normalidad frente a un cordón policial formado para contener posibles altercados, que finalmente no sucedieron.
Un portavoz de CC OO calificó a los responsables del ayuntamiento y a la oposición de "irresponsables" porque, en su opinión, "les han dado igual los ciudadanos y la dirección ha actuado con prepotencia".
El representante de UGT señaló que los acuerdos alcanzados son "insuficientes y habrá que empezar de nuevo". Uno de los puntos que mantienen las negociaciones estancadas es la petición de los trabajadores de la suma de cinco días de vacaciones a los 25 laborables de los que ya disfrutan.
La dirección de la empresa reitera que no pueden asumir compensaciones que vayan más allá de sumar un día más de vacaciones no consolidable.
La gerente de la EMT, Fuensanta París, insistió en que la empresa no podía mejorar la oferta del viernes consistente en ofrecer dos días más de vacaciones no consolidados, además de instarar otros dos baños, diez mamparas en otros tantos vehículos, revisar los horarios de la línea 5 y comprar sillas para el local sindical.
No tiene confirmación aún de la negativa de lo trabajadores, aunque indicó que en los próximos días intentará convencerles.
Los trabajadores critican que el Ayuntamiento no ha incluido en el nuevo pliego una serie de mejoras laborales firmadas en su día
El paro se extenderá dos horas los martes y viernes y se irá incrementando
El servicio de autobuses urbanos inicia una huelga parcial consistente en paros de dos horas de duración los martes y viernes.
Desde las 9.30 hasta las 11.30 horas de la mañana toda la flota de autobuses quedará estacionada en las cocheras del polígono industrial y los empleados se concentrarán en la puerta de los garajes como medida de protesta contra el Ayuntamiento por no haber incluido en el nuevo pliego de condiciones que regirá la concesión una serie de mejoras laborales firmadas por los trabajadores con la empresa GDF a lo largo de estos últimos años.
El anuncio de estos paros parciales fue realizado por el comité de empresa de la concesionaria, presidido por Matías Gautier, en compañía de José Rodríguez, secretario local de CC.OO. durante una comparecencia en la sede de dicho sindicato.
En ella, criticaron el "incumplimiento de las promesas" del área de Medio Ambiente para atender sus reclamaciones laborales, pero también aquellas otras destinadas a mejorar el servicio de autobuses y crear las condiciones apropiadas para la negociación de un convenio colectivo propio que sustituya al Convenio Provincial por el que actualmente se rige la plantilla.
"Nos vemos obligados a tomar esta medida (los paros parciales) porque nos dijeron que íbamos a participar en una mesa de seguimiento. Estábamos convencidos de que iban a tener en cuenta nuestras peticiones en el nuevo pliego para establecer mejoras en el servicio: se marcaban nuevos recorridos, el cambio de trazados para mejorar las líneas y la defensa del transbordo", lo que finalmente tampoco se incluyó. Los trabajadores reconocen que el trabajo de los técnicos que han redactado el nuevo pliego "es bueno, pero se podía haber mejorado", y piden disculpas a los ciudadanos por las molestias que los paros parciales puedan causar, aunque subrayan que "no nos queda más remedio que movilizarnos".
Los paros parciales están previstos para los días 5, 8, 12 y 15 de abril, de 9.30 a las 11.30 horas, y se incrementarán en otras dos horas por la tarde el 26 y 29 de abril y el 3 y 6 de mayo. Durante el tiempo de huelga, los trabajadores permanecerán concentrados en la puerta de las cocheras, aunque no descartan alguna movilización.
Quedan excluidos del calendario de paros parciales los días de la Semana Santa (del 16 al 24 de abril), cuando el servicio funcionará con normalidad, para evitar perjuicios a los ciudadanos y turistas. Aunque todavía queda algo lejano en el tiempo, se mantiene la incógnita de la Feria de Primavera (11 al 16 de mayo), ya que no se sabe si la protesta se mantendrá hasta entonces, aunque los trabajadores adelantan que en caso de que haya huelga se planteará como indefinida, con paros de 24 horas.
El nuevo pliego de condiciones para la explotación del servicio municipal de autobuses urbanos se aprobó en un pleno extraordinario el 11 de marzo. En el pliego se fijan las condiciones para adjudicar la concesión durante los próximos seis años. La actual empresa concesionaria, GDF, ha prestado el servicio 24 años, pero no ha podido garantizar su continuidad.
El proceso para la nueva adjudicación está en marcha: hasta el día 11 de abril las empresas aspirantes pueden presentar ofertas. El pliego de condiciones que regirá la concesión recoge que la nueva empresa tendrá que subrogar los puestos de trabajo, respetando la continuidad de toda la plantilla. Prevalecerá el 'sistema de gestión interesada', en el que el Ayuntamiento se hace cargo de los costes deficitarios del servicio, que se eleva a 2,6 millones de euros al año.