La situación laboral en la empresa de autobuses La Regional V.S.A. lejos de mejorar en los meses de "aparente caLma estival" no ha dejado de empeorar para los trabajadores hasta la fecha.
La dirección de la empresa sigue su política represiva de sanciones, expedientes y despidos selectivos contra aquellos que se salen del "consenso" establecido por la dirección y el comité de empresa (que se reparten UGT y CCOO).
Ante esta situación algunos trabajadores (de otros sindicatos o no sindicados) están intentando sacar una lista sindical alternativa para las próximas elecciones sindicales que deberían celebrarse en fechas próximas. Deberían celebrarse decimos, porque por ahora el proceso está paralizado por las denuncias existentes contra los últimos despidos (con sanciones recurridas y a todas luces inventadas) y por la denuncia contra la empresa por obstrucción a la libertad de acción sindical dentro de la empresa.

Recientemente, el pasado 12 de septiembre, hubo un juicio por una denuncia de un trabajador a la empresa. El trabajador denunciaba el cambio de jornada que había sufrido como represalia de la empresa por su combatividad. La empresa presentó como testigo a su favor al Jefe de tráfico, un impresentable y un fascista que es parte capital del proceso represivo que se está sufriendo (cuando la selección española ganó el mundial paseaba su bandera con el pollo). El obrero que se presentaba como testigo de la denunciante (testigo contra la empresa por tanto) fue inmediatamente despedido después de su declaración a favor de la compañera. Le acusan de varios partes y el despido se debe a estos partes y a otros expedientes que están todos ellos recurridos. Pero el despido ha sido pasado por la empresa como procedente. El despedido tiene que presentarse al juicio el día 14 de noviembre. El día antes, 13 de noviembre, se celebra otro juicio por faltas graves contra otro trabajador.

Como cualquiera intuye la cosa no quedará aquí porque ninguna de las partes parece dispuesta a ceder en sus posturas: por una parte, los trabajadores en sus derechos y en la improcedencia de las sanciones y el despido y la empresa, por otra, con sus represalias, sus expedientes y sus despidos.

Las elecciones sindicales en la empresa están paralizadas como decimos por los recursos y los partes discilinarios que han sido la causa de los despidos que hemos sufrido desde antes del verano y en septiembre. Los últimos dos despedidos, para que los trabajadores se hagan una idea de la represión que estamos sufriendo, son dos de las personas que estaban planteando la lista alternativa a las elecciones sindicales... El único despido que aceptaremos será el despido del impresentable del jefe de tráfico y de los sindicalistas vendidos al capital que no han movido un dedo a pesar de la gravedad de la situación.

Contra esta situación, como trabajadores, DEBEMOS AGUDIZAR LA LUCHA, AGUDIZAR Y EXTENDER LOS MÉTODOS DE LA LUCHA OBRERA Y DE CLASE, Y PONER FRENO A LA REPRESIÓN MEDIANTE LA SOLIDARIDAD Y LA ACCIÓN.

Los trabajadores debemos organizarnos independientemente de las siglas y la legalidad impuesta, por nuestros propios intereses como trabajadores y contra cualquier represalia, sanción o despido que la empresa quiera imponernos. Debemos, también, retomar las armas de la lucha de calses: el boicot activo contra las elecciones sindicales (que deje las urnas vacías sin representatividad, el boicot y el ataque contra todas las organizaciones que nos venden y reprimen, el sabotaje y la acción directa, la huelga indefinida y sin preaviso, fuera y contra el marco de negociación existente y la represióhn general y selectiva que representa. Solo así podremos imponer nuestras necesidades frente a la empresa y sus cómplices.

CONTRA LA REPRESIÓN Y LA EXPLOTACIÓN, ACCIÓN DIRECTA.

READMISIÓN DE TODOS LOS DESPEDIDOS.

octubre-2011